eu | es
Un caso entre muchos
GARMENDIA ERRASTI, JOSE MARIA «KOIPE»
Jose Maria Garmendia Errasti.
(Imagen cedida por Maite Garmendia Altuna).

     José María «Koipe» nació en Azpeitia en 1907 y era vecino de la calle Iglesia. Pintor de altares y retablos de profesión, oficio más conocido como «dorador», era militante del PNV y afiliado a STV desde 1932. Tras el inicio de la Guerra Civil fue nombrado vocal del partido y del Comité Local de Orden Público. El 19 de septiembre de 1936 abandonó Azpeitia, enrolándose posteriormente en el batallón de Intendencia n° 5 del Ejército Vasco. Su primer destino fue Elorrio, si bien, actuó en varios frentes hasta su detención en Laredo el 25 de agosto de 1937.

      Trasladado al campo de concentración de Aranda de Duero, el 20 de octubre de 1937 se emitió el acta de clasificación que resolvió mantenerlo en prisión (clasificado en el «apartado C») tras su declaración y el informe de la Guardia Civil de Azpeitia. Una vez se dio apertura al proceso sumarísimo de urgencia, fue trasladado a la prisión de Los Escolapios el 16 de mayo de 1938. Durante el mes de abril, llegaron al juzgado militar n° 12 de Bilbao informes de Falange y alcaldía de Azpeitia en los que se le acusaba de haber participado en varias requisas de aparatos de radio en domicilios de «personas de derechas», entre las que se mencionaba a Casto Orbegozo. En este caso concreto se aportó al expediente judicial «la copia exacta de un recibo de incautación» firmada por José María y en la que se especificaba la requisa de un «escritorio con su silla». Asimismo, se hacía mención a que una de las mujeres implicadas en la supuesta requisa llevada a cabo en Nuarbe era la «prometida o por lo menos en plan de noviazgo» del encausado. Se refería el informe a la que posteriormente fue su mujer, María Josefa Altuna Astigarraga.

      Además de ello, se presentó el testimonio de dos vecinos de Azpeitia. Por un lado, José Antonio Segurola Iturrioz declaró haber sido detenido el 19 de agosto de 1936 por José María y un teniente de la Guardia Civil. Por su parte, Victoria Aizarna Lizaso declaró como testigo del «saqueo del Círculo Tradicionalista», señalando al encausado como participante en dicha requisa y calificándolo como un individuo «de malos sentimientos con las personas de orden y sobre todo con las de derechas». De hecho, Victoria quiso añadir a su declaración el supuesto boicot que José María capitaneó contra un mitin del derechista Juan Pablo Lojendio en Azpeitia: «fue interrumpido por este sujeto de mala manera, siendo varias veces interrumpido y abucheado por este y sus secuaces». Con todo, el 19 de mayo de 1938 José María ratificó ante el juez militar su declaración anterior en la que reconocía tanto su militancia política como su actuación en el frente, si bien, negó haber interrumpido al candidato derechista Juan Pablo Lojendio y dijo no recordar haber detenido a José Antonio Segurola. En consecuencia, el 7 de julio de 1938 José María fue condenado a 20 años de prisión por un supuesto delito de «auxilio a la rebelión». Finalmente, el 1 de julio de 1941 le fue concedida la libertad condicional tras ser conmutada la pena por 6 años y 1 día de prisión. El 8 de septiembre de 1948 le fue otorgado el «certificado de liberación definitiva»(*).


[Azpeitiarras juzgados por tribunales militares franquistas — Leer más casos]
Un testimonio

En el penal de Dueso tuvieron al padre en zonas de tierra muy baja, y al subir la marea el agua le solía llegar a la cintura.

A mi padre, como era rojo, al salir de la cárcel no le dieron trabajo en Azpeitia.

Cada año, cuando llegaba el 18 de julio, me daba cuenta de que mi madre solía ponerse muy nerviosa.

 

[Kontxi Egibar Etxeberria — Leer el testimonio completo]
[Otros testimonios]