Vecino de Azpeitia. Gudari de la 2ª compañía Lartaun del batallón Loyola.
Nacido en 1913. Movilizado por los sublevados e incorporado al tercio de San Ignacio con la graduación de boina roja.
Nacida en Azkoitia y vecina de Azpeitia. Refugiada en Cerviá de Ter (Girona) junto a sus cuatro hijos: Carmen, Dominica, Maria y Manuel.
Natural de La Carolina (Jaén) y vecino de este municipio. Funcionario. Condenado en consejo de guerra a 12 años y 1 día de prisión por un supuesto delito de «auxilio a la rebelión». Encarcelado en la prisión de Azpeitia entre el 26 de marzo y el 23 de julio de 1941.
Natural de La Solera (Jaén) y vecino de este municipio. Labrador de profesión. Condenado en consejo de guerra a 12 años y 1 día de prisión por un supuesto delito de «auxilio a la rebelión». Encarcelado en la prisión de Azpeitia entre el 26 de marzo y el 23 de julio de 1941.
Nacido en Azpeitia en 1916 y vecino de Azkoitia. Labrador de profesión. Movilizado por los sublevados e incorporado al tercio de San Ignacio con la graduación de boina roja. Herido en el frente de guerra en agosto de 1938.
Nacido en 1916 en Azpeitia y vecino de este municipio. Charcutero de profesión. En 1940 el ayuntamiento franquista de Azpeitia lo incluyó en un listado de mozos del reemplazo de 1937 que habían servido en ambos ejércitos, calificándolo como «desafecto».
Vecino de Azpeitia. Dependiente de profesión. Miliciano del batallón UHP. Encarcelado en la prisión de Azpeitia entre el 7 y 13 de julio de 1939 por orden del gobernador civil de Gipuzkoa. Su detención se produjo junto a la de otros azpeitiarras como Juan Campos Loinaz y Daniel Altamira, los cuales acababan de regresar del exilio. Por tanto, es probable que Antonio también hubiera estado exiliado y que fuera detenido por la misma causa.
Nacido en Azpeitia en 1920 y vecino de este municipio. Escribiente. Movilizado por los sublevados e incorporado al tercio de San Ignacio con la graduación de boina roja.
Nacido en 1915 en Azpeitia y vecino del arrabal de Bustinzuri. Recluido en el campo de concentración de Gurs. Declarado «desafecto» por el ayuntamiento franquista de Azpeitia en 1940.
Nacido en 1916 y vecino de la calle Santiago. En 1940 el ayuntamiento franquista de Azpeitia lo incluyó en un listado de mozos del reemplazo de 1937 que habían servido en ambos ejércitos, calificándolo como «desafecto».
El mayor de los hijos de «Anttonbeltz», fue militante de Unión Republicana y afiliado a UGT durante el periodo republicano. Ebanista de profesión, tras el cierre parcial de la fábrica donde trabajaba al estallar la guerra acudió al llamamiento del Frente Popular para prestar servicios de guardia armada. El 19 de septiembre de 1936 huyó de Azpeitia y se instaló en casa de un familiar en Bilbao. En el mes de noviembre, al ser movilizada su quinta, quedó enrolado en el batallón UHP, donde prestó sus servicios hasta su detención en Cantabria en agosto de 1937. En el mes de octubre, encarcelado en El Dueso, fue interrogado por la Comisión de Clasificación de Prisioneros de Santoña. En base al testimonio de Juan y al informe de la Guardia Civil de Azpeitia, donde se le calificaba de «perseguidor y amenazador de toda persona de orden», fue clasificado en el «apartado C». Ya a comienzos de 1939 se abrió un procedimiento sumarísimo de urgencia contra Juan, siendo trasladado el encausado a la prisión de Los Escolapios.
Tanto los informes de Falange como de alcaldía ratificaban las acusaciones vertidas por la Guardia Civil, e incluso citaban a dos personas que habían sido detenidas por Juan: Ignacio Echeverria Altamira y Casto Orbegozo Embil. Ambos declararon en febrero de 1939 haber sido detenidos por agentes de la Guardia Civil y miembros del Comité de Defensa de Azpeitia entre los que se encontraba Juan, si bien, en el mes de marzo el juez instructor organizó varios careos entre el acusado y los testigos en los que éstos afirmaron no poder dar «seguridad absoluta» sobre la participación de Juan en su detención. En concreto, ambos testigos dudaban de cuál de los dos hijos de «Antton Beltz» había sido el autor de la detención.
Con todo, encarcelado en la prisión de Ondarreta desde comienzos de 1939, el 29 de abril de ese mismo año el consejo de guerra acordó clasificarlo en el «apartado B» y en consecuencia enviarlo a un batallón de trabajadores. El 20 de julio de 1939 fue conducido al campo de concentración de San Pedro de Cardeña. Un año más tarde, el 15 de julio de 1940, se abrió un nuevo procedimiento sumarísimo de urgencia contra Juan. Sin embargo, al poco de iniciarse la fase de instrucción se dio por sobreseído el caso al haber sido ya juzgado por los mismos hechos.
Simón fue un simpatizante nacionalista dedicado al comercio de ganado. Tras el inicio de la guerra, prestó servicios de vigilancia en la cárcel y guardias armadas en varios puntos de acceso a Azpeitia. Asimismo, a las órdenes del Comité de Defensa, estuvo encargado del tráfico de ganado, actividad a la que venía dedicándose profesionalmente desde hacía décadas. Por ese motivo, Roque Astigarraga (alcalde de Azpeitia) Julián Orbegozo (delegado de la Junta Carlista de Azpeitia) y su hermano Casto presentaron una denuncia ante la Guardia Civil de Azpeitia. Detenido el 15 de julio de 1937, cuando contaba con 59 años de edad y tras regresar de Bizkaia a donde había huido, fue trasladado a la prisión de Ondarreta mientras el juez militar de Donostia iniciaba un proceso judicial.
En las declaraciones ante el juez, tanto los tres denunciantes como los informes de Falange y Guardia Civil, ratificaron las acusaciones señaladas, si bien, incidían en la escasa implicación del acusado en las actividades del Comité. Más aún, Julián Orbegozo destacó en su declaración el buen trato que recibió de Simón mientras estuvo preso. Por todo ello, el juez instructor decidió que el tiempo que llevaba en prisión era suficiente sanción, proponiendo su absolución y puesta en libertad definitiva en abril de 1938. En el mes de agosto, concretamente el día 16, la Auditoria de Guerra de la 6ª Región Militar ratificó el informe judicial. El 24 de septiembre de 1938 fue puesto en libertad.
Victoriano nació en Azpeitia en 1894 y era armero de profesión. A comienzos de 1939 la Jefatura Nacional de Seguridad dependiente del Ministerio de Interior lo detuvo en Madrid, lugar donde al parecer había establecido su residencia, siendo acusado de un supuesto delito de «auxilio a la rebelión». En el mes de abril fue trasladado a la prisión de Ronda de Atocha n° 21, y el 14 de junio condenado por el consejo de guerra permanente n° 8 de Madrid a 12 años y 1 día de reclusión menor. Tras la condena, el 28 de agosto de 1939, fue recluido en el castillo-prisión de Cuellar (Segovia). Según la sentencia, Victoriano perteneció al PNV e ingresó voluntario en el Ejército Vasco «donde ascendió a teniente y prestaba sus servicios en una compañía motorizada».
El 19 de junio de 1940 la Comisión Provincial de Examen de Penas de Madrid propuso conmutar la pena impuesta por la de 6 años y 1 día. Dicha petición fue aprobada el 27 de julio de 1943.
Natural de Azpeitia y vecino de la localidad vizcaína de Areatza, Agustín fue durante el período republicano corresponsal del diario Euzkadi y secretario del batzoki de aquella localidad. Tras el inicio de la guerra el Comité Local de Areatza lo nombró delegado de Asistencia Social y sirvió como cabo de Guardias Cívicos. Además de ello, según la sentencia del consejo de guerra que lo condenó en noviembre de 1937 a la pena de muerte, gestionó «la recluta de jóvenes para las milicias vascas» y el envió de armas por parte de la Comisaría de Guerra de Bizkaia. Un mes después de ser condenado, la Secretaria General de Estado le conmutó la pena «por la de inferior en rango», es decir, por la reclusión perpetua.
Encarcelado en El Dueso, el 6 de agosto de 1938 fue trasladado a la prisión del Puerto de Santa María. Posteriormente, el 9 de diciembre de 1942, su destino fue la penitenciaria de Sevilla, lugar en el que permaneció hasta que en enero de 1943 le fue concedida la prisión atenuada.