Junto a ti al caer de la tarde
Junto a ti al caer de la tarde
y cansados de nuestra labor
te ofrecemos con todos los hombres
el trabajo, el descanso, el amor.
Con la noche las sombras nos cercan
y regresa la alondra a su hogar
nuestro hogar son tus manos, oh! padre,
y tu amor nuestro nido será.
Cuando al fin nos recojan tus manos
para hacernos gozar de tu paz,
y reunidos en torno a tu mesa nos darás
la perfecta hermandad.